Ayer le tocó el turno a Chanel para mostrar sus diseños para el próximo otoño - invierno, y una vez más, Karl Lagerfeld se salió gracias a la gran puesta en escena que monto en el Grand Palais, convirtiéndolo en un gran centro comercial donde las modelos se paseaban como si fueran a hacer la compra.
La colección fue muy deportiva e informal, donde predominaban los abrigos, los pantalones y las faldas de tweed, tejido característico de la firma en colores llamativos como el naranja, el verde y el amarillo junto con colores neutros como el negro y el gris.
Sinceramente la puesta en escena fue una autentica pasada, demostrándonos de nuevo que Karl Lagerfeld sabe cómo sorprender a la gente y hacer que hablen de él.
¿Qué os ha parecido la colección? ¿Y el centro comercial ¡Cuéntanoslo!